martes, 11 de octubre de 2011
Algo
Aquella señora de la esquina no tiene más preocupaciones que salir todos los miércoles a las 4 de la tarde y pararse frente a la catedral y tirarle migas de pan a una nube de palomas de todos los colores. Pero eso es porque ella ya vivió y lo que vive ahora es por vivir, no precisamente para vivir.
Siempre dicen que después de la tormenta siempre sale el sol, yo me pregunto, ¿es ésta en verdad una tormenta? no quiero minimizar ni maximizar. Pero me apesta ese cinismo que corroe hasta la cara, ciertamente todos caemos o hemos caído alguna vez en eso, pero puta que molesta, sobretodo cuando lo ves. Eso de andar diciendo cosas y hacer otras, eso de pensar algo y hacer otro, o hacer una cosa y decir otra, ¿no es lo mismo?
Nadie entiende, la verdad, nadie quiere entender o puede. Es un nudo muy pesado que guardamos todos en la garganta. Adán ya les dejó un recuerdo a cada hombre y a cada mujer, el recuerdo de recordarlo.
Tengo la respuesta a tu puta pregunta, y es: si en verdad te hubiese interesado, hubieras hecho algo. ALGO.
jueves, 15 de septiembre de 2011
De E eMe O Ce eRe A Ce I A
¿Por qué existe tanta diferencia, si nacimos bajo el mismo cielo, compartimos la misma luna y el mismo sol, y seremos todos devorados por gusanos hasta ser polvo?
domingo, 11 de septiembre de 2011
i w f u t l a s a
sábado, 3 de septiembre de 2011
Ciertamente...
La costumbre, una vieja fea, se sienta siempre al lado de nosotros cuando las decepciones se hacen cada vez más constantes, sobretodo si son de mano de una sola persona. Pedir perdón está bien, querer arreglarlo aun mejor, pero dar por hecho algunas cosas es la peor forma de querer hacer las cosas bien. Bien lo sabemos, bien poco lo entendemos y pues nada lo practicamos.
martes, 19 de julio de 2011
Clave
Igual que al final del día
faltan muchas cosas que conocer
hay muchas cosas que aun saber
Nada ha cambiado en absoluto
todo sigue igual en el mismo lugar
la misma habitación con el mismo olor
La tela de araña que se mueve con el viento
las cortinas que bailan
las paredes que me guardan
Ni las palabras ni los hechos
pueden cambiar verdaderamente lo que se es
puedo escuchar muchas cosas y ver
Puedo caminar con mis dos pies
mirar al cielo y rezar
pero nada va a cambiar
Porque no soy yo la que camina o avanza
es el tiempo que deja rastros en la arena
no son mis huellas las marcas que hay en ella
Yo decido que hacer con el tiempo
el tiempo decide que hacer conmigo
todo está dentro de esta esfera que todo lo guarda
Al igual que al final del día
Estamos solos
de la misma forma en que llegamos, nos vamos.-
domingo, 26 de junio de 2011
La vida no es algo que se esquematice, porque no es una cosa que se pueda dividir en horarios, bloques y asignaturas. Aquí el que gana es el más fuerte, y dentro de esta realidad, los fuertes son los esquematizados.
lunes, 13 de junio de 2011
Pausa
Pero la gente teme, ya no lucha, cree que luchar por sus derechos está mal, que es innecesario, que es utópico.
La gente cree que luchando le puede costar la vida.
Luchar, hoy es una cosa absurda, ¿cierto? total no perdemos nada si no hacemos nada ¿cierto?
Es cosa de tiempo tal vez, que se cumpla el circulo, invisible y conscinete en cada cabeza presente. Es cosa de tiempo tal vez, para que las flores sean sólo de papel, las aves disecadas, los animales abrigos del rico, el agua un pantano interminable, la única sombra en verano por un bulding, un edificio, aire dañino venenoso poison. La ciénaga de los muertos.
sábado, 11 de junio de 2011
viernes, 27 de mayo de 2011
Cava
Muchas veces lloré, muchas veces reí, mil veces me enojé y mil veces te creí.
Subí a lo mas alto del cielo con unas alas que nadie podia ver, y me las quité al caer, no quise volver a volar, no quería volver a sentir el dolor de mi peso contra el suelo con la furia de la altura. Me quedé postrada, me quedé sentada y aprendi a tropezarme con cuidado, hasta que di algunos pasos y crei caminar.
Somos tan ignorantes de nosotros mismos que formamos con hilos frazadas gordas de millones de historias que jamás vamos a poder aprender de memoria, pero siempre queda algo, ese hilo que te llamó la atención, esa frase de que no sabes de quien es, quien la dijo. La verdad es que la dijimos todos, es solo que, muy pocos supieron entonar una voz y el valor para juntar las letras y fonemas hasta poder pronunciarlas. Eso es lo que queda.
En el fondo el mas estúpido es el mas valiente, el que se atreve a cometer estupideces. Y por ultimo ¿quien no es estúpido?, ¿quien es superior o inferior?. Si dedicamos nuestras vidas a criticarnos, seguiremos cavando la tumba donde nos vamos a enterrar. Pero si en vez de juzgar y ver lo malo que hay del otro lado, podriamos simplemente apreciar, y tratar de solucionar desde adentro lo que nos falta. Esa cosa toxica que nos mata.
Somos nosotros mismos la plaga, somos nosotros mismos la peste que nos acaba.
Maldecimos, gritamos, escuchamos, pero sin embargo, no actuamos...
Pintura por Jilly Sears
jueves, 26 de mayo de 2011
La Micro
Sin embargo, hubo un día distinto, fue extraño desde su inicio. Desperté un poco más cansada de lo que habitualmente amanezco, me miré al espejo pero no noté nada extraño en mi cara, las ojeras estaban donde tenian que estar, el resto también. Tomé desayuno, una taza de té con dos cucharadas de azúcar más una tostada de pan con huevo revuelto (muy ricas por cierto), me vestí abrigada (era otoño) abrigo verde moco, botas marrón, pelo suelto, una bufanda burdeo y me fui a tomar la micro de las 8 am. Durante el día fue todo normal, hasta que en plena clase de Literatura noté que faltaba mi destacador naranja, lo había dejado en el velador antes de dormirme leyendo el apunte de Los tres ojos del Conocimiento. Fue terrible porque tengo una maldita manía de tener cada destacador para ciertas materias, el naranjo lo ocupaba para Literatura y el no tenerlo me descomponía entera. Sentí todo el día esa sensación de que algo me faltaba, no podía quitarlo de mi cabeza, empecé a sudar frio, ver todo nublado, y desperté en la enfermería de la facultad. La enfermera de turno me dijo que había sufrido un desmayo, me preguntó que había desayunado, vió mis ojos, mi garganta, el pulso, "debe irse a su casa"-dijo- "su cuerpo no da más con todo su cansancio". Me vi casi obligada a abandonar la faculad, no estaba acostumbrada a irme tan temprano a casa, eran recién las 12 del medio día. Fui al paradero, esperé la micro, me impresionó la congestión de tanta gente a esa hora esperando micro. Dejé pasar unas dos, pero otra vez volvió el destacador a mi mente, asi que tomé la primera micro que pasó (después de las otras dos que dejé pasar) y me subí, pagué, caminé hacia el fondo, no me senté porque estaban todos los asientos ocupados, seguía gente entrando a la micro, cada vez más apretujados y derrepente, ella. Ojerosa, pelo tomado, botas marron, abrigo verde moco y una bufanda burdeo. Le pagó al chofer, tenía cara de angustia, buscaba algun asiento y como estaba todo lleno suspiró de resignación, me miró, enrojeció. Me quise esconder, pero la micro estaba detenida, no podia moverme, ni ella.
sábado, 21 de mayo de 2011
Todos los gatos en la noche son negros
Cosas que se, cosas que me contaron.
Por ejemplo, sé que no te gustan los gatos. Se que era tu animal favorito, que sus ojos te enamoraban, que sus bigotes te hacían reír. Pero ya no lo es. Ya no lo es porque hay un gato en su corazón, un gato encerrado, un gato que llegó antes tú y ocupa el lugar que quieres, ocupa el lugar por el que luchas. Y finges, finges que nada ha cambiado, que todo sigue igual. Entonces los tomas en tus brazos, les haces cariño y juegas con ellos, pero tus ojos no pueden esconder la ira que tienes dentro, no puedes verlos a sus ojos sin ver al gato que lleva dentro.
Se que a Tu El no le gustan los gatos como animales favoritos o mascotas, pero también sé ya no los ve con el odio que los veía antes de que el gato este entrara en su corazón. Intentó, ya tu sabes, de echarlo, lo pateó, lo pisoteó, y creyó incluso haber ganado esta guerra que tenía con el, que tenía en secreto con el.
Porque el gato, para que sepas, se espantó un poco rápido, es de esos caseros/callejeros que no son muy estables, o sea sí, pero sólo con su amo. Y resulta que éste Tuyo, nunca fue su amo, entonces el gato simplemente se fue. Pero quedó su sombra, su casa, su manta, su alimento, sus pelos. Y es por eso que lo odias, odias los pelos, el alimento (incluso su olor), la manta, la casita, pero no puedes luchar contra una sombra.
Incluso odias el odiar a los gatos. Estuviste afuera de la casa por un tiempo, esperando que te abrieran, cantando todas las mañanas como dulce pajarito, pero Tu El sólo le abría la puerta al gato, que volvía después de callejear.
Pero es cierto también que el gato se fue de la casa un día, pero volvió varias veces porque Tu El lo fue a buscar muchas veces. Sobrio y ebrio, conseguía que el gato se quedara un rato en la casa, pero cada vez el gato tenía menos tiempo, y cada vez se iba más temprano, más pronto.
Por otro lado, el gato a ti nunca te ignoró, siempre se restregó en tu brazo, pierna, siempre te saludó. Pero nunca se despidió, por lo menos no de ti. Entonces, ahí tu golpeaste la puerta, y encontraste el crimen perfecto, desde ese día es que odias a los gatos.
Entraste, te vestiste, dormiste, y comiste, pintaste la casa de otro color, por el puro miedo de que el gato volviera, así pensaste que podría confundirse y no reconocerla. Pero olvidaste algunos detalles, detalles como el orden de la casa, las cosas que quedaron allí. Olvidaste los lugares por donde Tu El caminó junto al gato (lugares por donde siguió caminando) olvidaste que por las noches frías ambos se ponían salvajes después de su rito íntimo. El gato como llegó podría volver, aun así no te enfrentas a el, porque te dan miedo sus ojos y no poder cantar más como dulce pajarito.
El gato caminaba siempre por los alrededores, así fue como Tu El lo encontró. Una vez quedó mal herido, a muerte, pero por ese tiempo el gato se mantuvo escondido, no fue amenaza alguna para ti. Pero aun así, Tu El lo extrañaba, y lo buscaba secretamente algunas noches, porque ya al tenerte a ti, tu juego y tus dinámicas telarácnidas no lo dejaban escapar. Mas bastó un sólo descuido.
El gato después de una lenta y larga recuperación, volvió a caminar. Fue justo en ese descuido cuando Tu El salió a caminar y se encontraron frente a frente.
A penas despertaste en medio de la noche saliste a buscarlo, por calles y pasillos llenos de fantasmas felinos, una misma sombra multiplicada, tu pesadilla nocturna es que todos los gatos en la noche son negros, sólo encontraste al gato. Escalofríos, puto sentimiento ¿verdad?, no te atreviste a mirarlo a los ojos, sólo volviste y esperaste. Por la mañana el gato se apareció frente a la casa, cerraste las cortinas y saliste al jardín.
¿Volvió a tu casa distinto?. Respóndeme esa pregunta que es lo único que no sé.
martes, 17 de mayo de 2011
De todas las desesperaciones...
De todas las desesperaciones, la de la muerte tiene que ser la peor
ella y el miedo a morir, cruz y raya
cuando ya se puede pronosticar el día y la hora
Hay una fea probabilidad de que el miedo a morir y la desesperación de la muerte sean
normalmente inseparables como la uña y la carne (...)
Diario de Muerte
Enrique Lihn
Pintura: Caitlin Hacket
miércoles, 11 de mayo de 2011
Autorreconocimiento (Damsi Figueroa)
Yo no soy la que se pierde
tan pronto como se la encuentra
El amor en mi no se toca
se escribe
Yo no soy pieadosa con los hombres de poca fe
no intercambio los calzones con nadie
en cambio asumo la desvergüenza
de una desnudez colectiva
en una casa de playa
o en una playa a secas
Yo no escribo para nadie
aunque intente escapar
y evite sacarte al baile
Tus malabares y piruetas
siempre exigen un aplauso cerrado
es decir, una palabra
Yo no me complico la vida
omitiendo adverbios y conjunciones
Patino por la hoja
y tapo los surcos amargos
con la sangre de mis amigos
Yo no hago el amor
lo desarmo
por el puro gusto de volverlo a armar
una y otra vez
hasta tener sexo
para olvidarme del amor
y de todos ustedes.
por Damsi Figueroa
martes, 10 de mayo de 2011
Colondrinas en otoño.
La señora Golondrina decidió irse, lejos, aunque no sabía su destino ni paradero. Tenía alas, sabía volar, y escapó sin tener que escaparse, escapó sin estar prisionera, escapó porque quiso escapar. Meses estuvo Colondrina zanahondrina volando, llorando después de su exilio sin ser exiliada. Se fue al otoño donde se escondía en la copa de los árboles, llegó a isla negra donde vivía un caballero de boina y ñata imposible de esconder. Hablaba raro y pausado, casi en melodía, casi en forma de lamento, pero le faltaban las lágrimas, pero estoy segura de que no el sentimiento.
Resulta que este caballero tenía un pájaro, un amigo (así le decía él) una Lechuza, o mejor dicho, un Lechuzo, que originalmente así mismo se llamaba.
Lechuzo era una lechuza azul, de pecho blanco y ojos negros, raro en su especie, raro en su mente. La señora Golondrina lo conoció, pues, en los crepúsculos otoñales, cuando el caballero de la boina fumaba su pipa mirando el mar, ya que le gustaba escuchar a Lechuzo haciéndo preguntas, respondiéndose solo y mirando la luna, todo esto, antes de irse a dormir. En las mañanas lo extrañaba, a media noche a veces se despertaba, Lechuzo cantaba, susurraba cuentos, susurraba encantos, leyendas de cripta y Golondrina con terror se despertaba.
Un crepúsculo otoñal, que no era ni día ni noche, Colondrina se posó en la copa de un árbol vestido de amarillo, era extraño, el viento costero había cesado, aun así la brisa no los había abandonado. Colondrina miraba las hojas y escuchaba su último aliento, se puso a llorar, se imaginaba cayendo junto con ellas al suelo, muertas y listas para ser pisadas y chillar de dolor antes de morir completamente. Lechuzo tras ese llanto se despertó, y no entendía que pasaba. Don Boina de pipa y ñata justo caminaba cerca, y escuchó también el llanto. Lechuzo y Don Ñata de pipa y boina se miraron y vieron a Colondrina zanahondrina que lloraba desde arriba del árbol. ¿Qué pasa pajarita? - preguntó Lechuzo- ¿por qué lloras tan temprano si la luna ya está por salir?. No es la falta de luna la que me hace llorar- dijo Zanahondrina- son las hojas amarillas, mis plumas naranjas y cada vez más descoloridas las que me hacen lamentar. ¿Y por qué te lamentas por las hojas amarillas si tu eres una pajarilla, no una hoja?- preguntó Lechuzo- puedes volar, no vas a caer como ellas. A lo que Golondrina respondió: ¿Se caen, o se suicidan?, ¿tendrán mucha pena que abandonan su hogar junto a todas las demás?, ¿La pena las lleva a abandonar su vida?. Se suicidan, sí, se suicidan-dijo Lechuzo- porque estando allá arriba aun siguen con vida. ¿pero por qué?, volvió a preguntar Zanahondrina. Don Pipa de Boina y ñata que escuchaba toda esa conversación, se sorprendió por la pregunta que hizo la señora Golondrina y le respondió: "Porque se sienten amarillas".
Golondrina sorprendida por la respuesta que el caballero de la pipa le dio, se calló y miró atentamente las hojas, luego miró sus alas cada vez más descoloridas, y sintió miedo por lo que pensaba, entonces le preguntó: ¿Porqué se suicidan las hojas cuando se sienten amarillas?
El señor de la pipa miró a las aves envueltas por un manto amarillo que lentamente se deshojaba y enterneciéndose por la pregunta de la triste Golondrina le responde: Se suicidan al ver que existen hojas amarillas que pueden volar, hojas que fueron naranjas, hojas que tuvieron otro color. Intentan, creo yo, con su último suspiro, saber lo que es saltar de la copa y ser llevadas por el viento que tanto las sedujo en verano cuando estaban aferradas a su rama. Intentan ser Colondrinas, colondrinas en otoño.
-.-
Esperamos tantas cosas sin hacer nada, y el que no espera luego cae por haber negado escalones que sutilmente se pisaron/Lo mejor de viajar es viajar/Mentira, palabra hermosa, estética hasta plástica/ Verdad, palabra suave, pero cruda/Estamos hechos de tierra, carne, sudor y sangre. Somos kamikazes de la vida y frente a eso no hay nada más que hacer/Pueden ser los días, puede ser la lluvia, pueden ser las hojas amarillas que se suicidan desde la copa de los árboles/¿es que a nadie le importa nada?/ no se trata de hacerme problema por ese tipo de cosas, la vida no es una pincelada nada más pero tampoco lloraré por cosas que tienen solución/ en otras manos dejamos los problemas propios/ responsabilidad... ¡qué mierda es eso?/más abajo mi sangre no se apresura y mi respiración es cada vez más pausada/ Pero siempre existen peros, sin explicaciones, sin ataduras, un escupito y listo/ Desearía poder hacer, pero a estas alturas es casi imposible/casi/ Casi no te veo, casi no te conozco, casi mi piel se descompone, casi el romanticismo deja de ser romanticismo, casi me muero.
Verborréa.
~Pintura: TransLucy, Jacqueline Gallagher~
jueves, 28 de abril de 2011
Belleza
Hecha música y pintura, en acordes y colores, en formas tanto simétricas como asimetricas, mas sin embargo, siempre perfecta.
Ensuciada por la perfección estética técnica, después de cálculos, números, y tiempos. Hedionda y putrefacta, porque no es.
Te encuentras y te pierdes con mensajes tan claros e implícitos, acordes y colores que un sordo y un daltónico se ve casi obligado a desmenuzar. La canción, la textura, el olor.
Una fotografía. ¿Hay algo más que no lo pueda decir el tacto?, algo que el oído no pueda escuchar.
Entonces, no sólo es obvia ante la retina, también ante la primera capa perceptiva del ser. Que lo "técnicamente hablando" se vaya a la mierda, se de una vuelta y se pierda. La voz es una, la voz son todas.
La Pietá, Miguel Angel.
sábado, 9 de abril de 2011
De Lázaro y el escudero. (Francisco Rico)
Lázaro y el escudero.
Técnica narrativa y visión del mundo.
Francisco Rico.
El lazarillo está clasificado como una novela epistolar (invocaciones a un ser superior jerárquicamente hablando “Vuestra Merced”), retratada como una pintura renacentista (rechaza los prejuicios tradicionales).
El tema que aborda es sobre su triste y humilde vida, escrita de una forma verosímil en primera persona para que el lector se introdujera en la misma historia y sintiera y viviera lo que el lazarillo vivía y sentía. Así el deseo del realismo la movió a que adoptara la forma autobiográfica.
Es el “yo” quien da al mundo una verdadera realidad. Está en primera persona para problematizar la realidad, a devolverle la incertidumbre con la que el hombre la enfrenta, humanizándolo (pág. 372) A diferencia de la tercera persona que frecuentemente supone un universo estable y univoco, de consistencia y significación.
De la vida de los hombres Infames (Michel Focault)
Michel Focault intenta mostrar a través de su herbario de antología de vidas, considerada también como leyenda negra, avisos de personas que eran completos anónimos y que por azar y su suerte resultaron escogidos por el.
Estos avisos (por la brevedad en la narración y realidad de los sucesos consignados) no muestran un relato de la vida, sino momentos críticos donde la persona lucha contra su destino, se enfrenta a poder y a su suerte.
Focault intenta mostrar las vidas tal cual fueron, dejar al margen y “suprimir” todo aquello que pudiera resultar producto de la imaginación o de la literatura. Que los textos tuviesen la mayor relación posible con la realidad. No muestra los avisos como un relato de la vida misma de aquellos autores.
Estos avisos son considerados como leyenda negra, “porque aquí se produce como en todas las leyendas un cierto equívoco entre lo ficticio y lo real, aunque en este caso se invierten”. (pág.81). A diferencia de la leyenda dorada, no ha sido transmitida, es una leyenda sin tradición.
El texto se limita a mostrar lo que les pasó y no quienes son, o la historia de su vida. “Si el héroe existió la leyenda lo recubre con tantos atributos imposibles que es, o casi es como si no hubiese vivido.”(pág. 81)
El poder y la existencia misma son puntos clave dentro de estos avisos, ya que muestran violencia, energía y el exceso en la maldad, la villanía, la bajeza y obstinación y la desventura, la mediocridad y en su encuentro con el poder luchan contra el, porque es él quien decide su suerte, todo esto en archivos de encierro, policiales, ordenes reales y lettres de cachet.
Por estas razones, es que el poder se transforma en un objeto de codicia y seducción, lo que lo hace absolutamente temible.
Este discurso exige un lenguaje decorativo, un tanto exagerado, digno de atraer la atención de un superior (monarca). Su retórica y sus efectos de lenguaje “a veces nos encontramos con un suntuoso monumento verbal para contar una oscura villanía o una intriga sin importancia, otras algunas frases breves que fulminaban a un miserable y lo arrojaban a las tinieblas, y en otras el largo recital de las desgracias era presentado adoptando la figura de la súplica o de la humillación. El discurso político de la banalidad no podía ser más que solemne.” (pág. 86)
Para esto, Focault puso algunas reglas para sus “avisos”:
- Que se tratase de personajes que hubiesen existido realmente
- Que sus existencias hubiesen sido a la vez oscuras e infortunadas
- Que esas existencias fuesen contadas en pocas páginas o frases de la forma más sucinta
- Que los relatos formasen parte realmente de la minúscula historia de esas vidas, de su infortunio, de su rabia o incierta locura.
- Que del choque producido entre esos relatos y esas vidas surgiese para nosotros todavía hoy un extraño efecto mezcla de belleza y espanto.
martes, 5 de abril de 2011
Lectura y Lectores
Es cierto que el leer hoy en día no es una actividad de privilegio, aunque si leemos todos los días y el porcentaje de no letrados en la población ha disminuido considerablemente al pasar de los años. Aun así, el leer no es la actividad preferida por la población chilena. El leer el diario todos los días, un libro, una novela, ensayos, o textos científicos no encabeza la lista de cosas que hacer en una tarde para un niño joven entre los 11 y 19 años. Esto hace que exista una gran preocupación por las personas que no son capaces de comprender lo que leen.
Es cierto que en el colegio nos imponen textos de lectura, los mismos de hace 10 o 20 años, los típicos clásicos, pero que en el fondo a las nuevas generaciones menos les va interesando. Lecturas fomes, lecturas lentas y fuera de época, temáticas que no se dan hoy en día. Pero es cierto, que el modelo de la mayoría de estos textos es el mismo que se usa hoy en día, lo único que cambia es la época en que se reproducen las historias y que los alumnos no son capaces de entender. Por esta razón, es que pierden el interés de leer, formándose un nuevo tipo de lector, el lector perezoso. Este nuevo lector no se preocupa de ver el trasfondo del texto, por así decirlo, lo que está entre líneas, se limitan a sólo entender de qué es lo que se está hablando, sin embargo el ojo crítico y la reflexión se mantienen al margen, en estado off ya que su participación es casi nula, o sea, es capaz de descifrar pero no de leer, capaz de memorizar pero incapaz de comprender.
Esto hace que nuestro país no sea un buen referente en los informes relativos a la evaluación del nivel de competencia lectora (entiéndase el término "competencia" se refiere a una combinación de destrezas, conocimientos, aptitudes y actitudes)
Aunque toda la sociedad esté obligada a leer todos los días (sí, obligada a leer todos los días porque todos los días nos encontramos con anuncios, propagandas, letreros, notas, etc.) ha hecho que la cultura icónica prolifere de manera exponencial en los últimos años, fuertemente post Internet, haciendo que con ella crezcan hábitos de ocio alternativos como los videojuegos, televisión, o la ya antes mencionada Internet, todo esto en detrimento de la lectura. Por lo tanto, esto está afectando el carácter cognitivo y cuyo déficit produce efectos tales como un esfuerzo desmedido al leer o una incapacidad de concentración. Esto hace que haya un abandono de la lectura, un menor entrenamiento del lector (porque estas habilidades lectoras sólo se obtienen mediante la práctica, o sea, leyendo) lo que desemboca en una mayor dificultad comprensiva y la total actitud negativa hacia la lectura.
(basado en la ponencia "Un nuevo enfoque de la competencia lectora basado en diferentes tipos de comprensión" de José A. León.)
sábado, 26 de marzo de 2011
Imaginación y Realidad
La imaginación “(del latín imaginatĭo, -ōnis) es un proceso superior que permite al individuo manipular información generada intrínsecamente con el fin de crear una representación percibida por los sentidos de la mente. «Intrínsecamente generada» significa que la información se ha formado dentro del organismo en ausencia de estímulos del ambiente.”(wikipedia). A la imaginación la encontramos en textos, películas, diseño, materialismo, orden, etc.
La imaginación no sólo se encuentra en la mente humana, sino que también en hechos y cosas concretas. Por ej. Un diseñador imagina una nueva forma de una silla, la crea, la ve, la siente y la toca. ¿Está tan lejos lo imaginario de lo real? La verdad es que a penas un hilo las separa. Ya que lo que las diferencia es que una no es tangible y la otra si, y la que es tangible más que ser imaginación es un algo imaginado, es un producto, el producto de dicha imaginación.
Como lo es al comienzo, cuando somos niños y vemos cosas que nunca se han visto en la televisión, y si es así, en películas que están fuera del alcance de los niños. Y es que como son purísimos, sus sentidos y cerebro pasa por el periodo de adaptación a la realidad establecida por su grupo social más cercano. Comentarios que frecuentemente reciben “ves mucha tele”, “lees/te leen muchos cuentos”, “¡pero que imaginación!” Y es por eso mismo que el niño, con el tiempo, va cerrando esos sentidos que más adelante, por el poco uso, los olvida y cree que esas cosas increíbles son únicamente producto de la imaginación y que sólo se encuentran en libros y películas. Pero lo cierto es que la imaginación de esos escritores, guionistas, directores y productores, no es tan original, sólo recrean un mundo que en su memoria está nebulosamente almacenada.
Es cierto que está científicamente comprobado que a veces vemos cosas producto de un factor “x” que se proyecta en imágenes, pero ¿porqué lo vemos?, ¿porqué lo sentimos?, ¿porqué creemos o pensamos ciertas cosas al ver algo?. Todo lo que vemos a nuestro alrededor es texto, lo que conlleva a darnos un mensaje que a la vez lo estamos leyendo y al entenderlo creemos y creamos.
Es posible que si no hubiésemos alterado el equilibrio de las cosas, nuestros problemas no serían tan complicados, nuestro sentido no estaría atrofiado, y los enfermos de locura, estarían simplemente locos como todos.
Una dimensión más cerca y menos valorada, es la dimensión del sueño que va más allá de nuestras mentes y el cuerpo físico. No es ficción. Durante el sueño nuestro yo se escapa al futuro hogar, u otro hogar. La historia continúa, es un espacio completamente real. Conocemos lugares, personas, es otra vida completamente compartida. El punto es que pocos dudan y muchos no creen, debido a éste chip impuesto, “la imaginación”, excusa de lo inexplicable.